Enel se ha propuesto el desafío de incorporar la economía circular en sus procesos, con la intención de contribuir en la mitigación de los impactos producidos por el cambio climático. Un buen ejemplo de esto es el “Proyecto Valorización de Residuos Central Termoeléctrica Bocamina”.
La generación eléctrica de la unidad 2 de Bocamina produce yeso y cenizas como subproductos, los que antiguamente eran considerados “residuos” y como tal, su disposición final se realizaba en vertederos. Sin embargo, bajo la mirada de la economía circular, las cenizas y el yeso son ahora materiales valiosos que pueden tener un segundo uso o una extensión de sus ciclos de vida, a través de su comercialización como materias primas en procesos productivos de industrias cementeras locales.