Las energías renovables llegan a Ollagüe

Desde el 2014 los habitantes del poblado de Ollagüe, en la Provincia del Loa en la Región de Antofagasta, tienen por primera vez energía eléctrica las 24 horas del día. Es la primera planta híbrida en el mundo que combina energía solar, eólica y la cogeneración con almacenamiento de energía eléctrica en baterías de sales fundidas, proporcionando energía a hogares a gran altitud y en condiciones climáticas extremas, con temperaturas entre -20°C y +20°C.

La planta, que combina energía fotovoltaica, una turbina eólica de eje vertical y un sistema de cogeneración para la producción de electricidad y agua caliente para la escuela de la localidad, tiene una capacidad instalada de 235 kW y generará aproximadamente 460 MWh al año, equivalentes al consumo eléctrico de aproximadamente 150 hogares.

Pero desde la entrada en operación de la primera planta híbrida en Chile el consumo de petróleo disminuyó en aproximadamente 85%, bajó la huella de carbono y mejoró la condición ambiental de Ollagüe, al consolidarse un modelo energético sustentable. De esta manera, ya no se generan ruidos molestos y los habitantes finalmente disfrutan de suministro eléctrico las 24 horas.

Esta mejora ha llevado a un cambio radical en la calidad de vida de las personas, así como también en la posta rural, escuela, sede comunitaria, municipalidad, dependencias de Carabineros e Investigaciones, Aduanas y en servicios, como restaurantes y albergues.

La construcción de la planta híbrida significó un intenso trabajo asociativo y participativo con la comunidad indígena local, donde esta jugó un rol central en las definiciones estratégicas del proyecto. Los habitantes, en su mayoría pertenecientes a la comunidad quechua, fueron involucrados directamente en las definiciones de la planta y recibieron capacitación para la correcta utilización del sistema.

Este innovador proyecto, para el que se instalaron más de 1.600 paneles fotovoltaicos, se convierte en la primera planta híbrida de energía renovable para uso comunitario de Chile. Ha sido posible gracias a una alianza público-privada entre Minera El Abra y Enel Green Power, con el apoyo de la Seremi de Energía, la Universidad de Chile y el municipio de Ollagüe, quien es responsable de la mantención y administración de la planta.