Enel en Chile se despide del Carbón
El pasado 27 de mayo, el directorio de Enel Generación Chile anunció su decisión de adelantar el cierre de las dos unidades del complejo termoeléctrico Central Bocamina, ubicado en Coronel, la última planta a carbón de la compañía en el país.
El retiro y desconexión final Bocamina ahora está planificado a más tardar para el 31 de diciembre de 2020, originalmente estaba previsto para fines de 2023. En el caso de Bocamina II, a más tardar el 31 de mayo de 2022, el plan original contemplaba su cierre para máximo 2040.
Para concretar esta medida la compañía solicitará formalmente al secretario ejecutivo de la Comisión Nacional de Energía (CNE) que se autorice el retiro final, desconexión y cese de operación de Bocamina I (128 MW) a más tardar el 31 de diciembre de 2020 y de Bocamina II (350 MW) a más tardar el 31 de mayo de 2022.
Esta definición implica adelantar sustancialmente las fechas de cierre comprometidas por la compañía en el Plan de Descarbonización Nacional suscrito con el Ministerio de Energía el 4 de junio de 2019 confirma el liderazgo del Grupo Enel en Chile al acelerar sus compromisos para enfrentar los efectos del cambio climático, al tiempo que avanza en su plan de añadir 2GW de energías renovables hacia 2022.
La transición energética es la respuesta de la industria para avanzar hacia una economía sostenible nula en carbono, por medio del uso de energías renovables que permitan reducir las emisiones de gases efecto invernadero, sumado a medidas de eficiencia energética que den respuesta a las principales tendencias globales como son la urbanización, el aumento de la demanda y la electrificación del consumo energético.
Ante este panorama, consideramos innegable nuestro rol en la transición energética y lo asumimos como un compromiso propio, cuyo cumplimiento se ha reflejado en los últimos cinco años mediante nuestro posicionamiento como el principal operador de fuentes de energía renovables en Chile. Actualmente, aportamos el 43% de la generación renovable a la matriz energética nacional, contando con 1,2GW instalados en energía eólica, fotovoltaica, geotérmica, capacidad que aumentaremos con 2GW adicionales al 2022.
El Grupo Enel ha establecido una estrategia global que apunta a descarbonizar su parque generador al año 2050, comprometiéndose a reducir en un 70% las emisiones CO2 por kWh generado, respecto a la línea base 2017, acorde con la última versión del Science Based Targets Iniciative (SBTi) de abril 2019. A la vez, el Grupo Enel se comprometió a reducir en un 16% sus emisiones indirectas para el 2030, siempre respecto al año 2017.
Desarrollo de renovables
Como parte de la apuesta por avanzar a una matriz energética cada vez más limpia, Enel Chile avanza en el desarrollo de los proyectos incluidos en su Plan Industrial. En total, estas iniciativas buscan sumar 2 GW de capacidad instalada renovable al 2022 de los cuales la mitad ya está en construcción. Entre los proyectos en desarrollo destacan Azabache (60,9MW), la primera planta industrial híbrida en el país; Campos del Sol (382MW), una de los proyectos solares en construcción más grande de Chile y la ampliación de 33 MW de Cerro Pabellón (48MW), la única planta geotérmica en operación en Sudamérica.
¿Cómo darle un respiro a nuestro planeta?
Consideramos que la transición energética no es un asunto solo industrial, si bien es indispensable pensar en un modelo de negocio sostenible para todas las industrias, es necesario generar las condiciones para que la sociedad entera pueda seguir en la misma senda. Por esto, nuestra inversión social está mayormente dedicada en acompañar a las comunidades hacia la sostenibilidad de su estilo de vida y de su infraestructura. En esta hoja de ruta se insertan varias iniciativas.
Quillota Respira frente al cambio climático contemplala arborización más grande de Chile. Este proyecto implementa, en total, la plantación de más de 100 mil árboles de forma participativa y con instancias de educación medioambiental, poniendo a las personas en el centro de la acción climática. El proyecto contribuye a la mitigación del impacto de la alza de temperatura en el microclima urbano.
Quintero Mide, en tanto, es un programa que busca fortalecer las competencias técnicas, económicas y administrativas de dirigentes sociales y vecinos, para co-diseñar un sistema comunitario de monitoreo ambiental en una de las bahías más contaminadas del país.
Más al sur, se desarrolla el Programa de Gestión Hídrica en la Cuenca del Río Maule. Orientado a generar tecnologías y capacidades que permitan la optimización del uso del agua, con la finalidad de reducir los impactos del déficit hídrico, tanto en la actividad agrícola como en la generación hidroeléctrica.
Estos, son solo algunos de los programas y proyectos que Enel Chile lleva a cabo en distintas regiones del país, cuyo objetivo es aminorar los efectos del cambio climático, en línea con el Objetivo de Desarrollo Sostenible número 13 relacionado con Acción por el Clima, impulsado por Naciones Unidas y al cual nuestra Compañía está adherido.
El mundo en alerta
El aumento de la población, el crecimiento económico y el cambio climático ponen una fuerte presión sobre los recursos del planeta, cuyos efectos se manifiestan principalmente en el alza de la temperatura, la disminución de las precipitaciones y, a la vez, en eventos climáticos extremos como sequias e inundaciones.
Frente a esta situación y según información reportada por el Ministerio de Medio Ambiente y por estudios internacionales, Chile es uno de los países más vulnerables ante la crisis climática.
En este contexto, el cambio climático se presenta hoy como uno de los principales desafíos al que se enfrenta la sociedad en su conjunto, ya que los impactos que este genera pueden profundizar, potencialmente, algunos de los retos sociales que se presentan en el país como lo son la desigualdad e inequidad.
Enel Chile, actor proactivo en el país, aborda el cambio climático en su estrategia de negocio con su plan estratégico enfocado en la descarbonización de su matriz energética, junto a las políticas específicas que guían las operaciones de la empresa, principalmente la política de medio ambiente y de biodiversidad. La Compañía cuenta, además, con un sistema de gestión ambiental integrado a través de los compromisos del Grupo con organizaciones internacionales, con las cuales colabora para lograr la sostenibilidad ambiental de nuestro quehacer.
En los últimos años, la crisis climática ha afectado gravemente a Chile, agudizando una sequía que ha comprometido el desempeño de las centrales hidráulicas, reduciendo su aporte de generación en un 7% durante el año 2019, lo que trajo como consecuencia incrementar las emisiones de CO2 por kWh generado. Esta contingencia se está abordando mediante la aceleración del desarrollo de nuevas plantas eólicas, solares y geotérmica. Simultáneamente, en el ámbito de la gestión del recurso hídrico, Enel Chile está llevando adelante programas para la conservación de las cuencas y de sus ecosistemas, junto con una mejora en la eficiencia de las centrales térmicas, permitiendo optimizar el uso del recurso hídrico.
Economía Circular: la solución frente al Cambio Climático
Enel Chile se ha puesto el desafío de incorporar la Economía Circular en toda su cadena de valor y en sus líneas de negocio a través de la innovación, para desacoplar el desarrollo económico de la explotación de los recursos naturales.
El cuidado del medio ambiente y los recursos naturales son factores estratégicos en la planificación, desarrollo y operación de las actividades de Enel Chile y sus filiales.
Trabajamos diariamente, con pasión y acciones concretas, para cuidar nuestro planeta en línea con el nuestro propósito Open Power for a brighter future.
En el siguiente link, podrás encontrar en detalle cada una de las acciones de la compañía en relación al Cambio Climático.